Defensor de DDHH exige justicia a cinco años de muerte de su hijo - Runrun
Defensor de DDHH exige justicia a cinco años de muerte de su hijo
Luis Armando Urbano fue presuntamente asesinado por miembros de la Policía de Sotillo en el estado Anzoátegui 

El 10 octubre de 2016, Luis Armando Urbano, de profesión electricista, trasladó en su moto a una mujer hacia Puerto La Cruz, sin saber que sería su último día de vida o lo que su padre, José Luis Urbano, defensor de Derechos Humanos mencionó caería en supuesto “un anzuelo”.

Tras llegar al sitio se salió la cadena de su moto y al pararse frente a una casa para remediar la situación, fue alertado por una habitante de la zona que tuviera cuidado porque había un grupo “malo” llamado “Los Cuatro Fantásticos de la Muerte”.

El joven dudó y tras intentar retornar, fue sorprendido por efectivos de la Policía de Sotillo (entre ellos “El Pechuga” y Richard Rattia), quienes presuntamente le propinaron un primer disparo en el hombro, una patada y le dejaron un mensaje bien claro: “Tú vas pa’ muerte porque eres hijo de un defensor de Derechos Humanos”, así lo denunció el progenitor a la Fundación de Derechos Humanos de Anzoátegui.

Urbano manifestó que la muerte de su hijo fue justificada como enfrentamiento, y que según informaciones aportadas, presuntamente los funcionarios comentaron entre risas, en una licorería, cómo habían ejecutado al muchacho en el cerro Makro.

Detalló que su hijo presentó desde un solo orificio de entrada, cuatro tiros de salida porque le pusieron un cartón en el pecho “y movieron el ángulo de la pistola para que las balas se movieran por el cuerpo”. Asimismo que presuntamente fue presentado por Richard Rattia a las 5:45 pm como fallecido en el hospital, y que según la versión del CICPC, su hijo tenía una supuesta arma, de la que asegura, fue sembrada.

Tras denunciar el hecho a ONGs internacionales y nacionales, “un mes después de la ejecución se presentó una comisión de criminalística de Caracas, levantaron las experticias y se dieron cuenta de que el arma no servía y que la distancia de donde lo llevaron herido, el tiempo, la hora, más un video, demostraba que a mi hijo se lo habían llevado vivo. Entre el 2017 se imputa y
se ejecuta la medida de detención en el 2018”.

Sin embargo, tiempo después descubrió que más ciudadanos habían sido víctimas de Richard Rattia y de la Policía de Sotillo, y que la presión de los organismos nacionales e internacionales creció, situación por la que según Urbano, fue presuntamente amenazada la testigo principal por un abogado para que cambiara su versión, ella se negó y al tercer día le asesinaron a su
hijo.

El defensor comentó que desconocía toda la presunta presión policial que se desencadenaría tras exigir justicia por la muerte de su hijo, hecho que lo llevó a vivir en la clandestinidad para salvaguardar su existencia.

En cuanto a los presuntos responsables de la muerte de Luis, aseguró que están privados de libertad pero con beneficios. “Ellos están ahí en su comando, en la noche van a dormir a su casa, los fines de semana salen a parrandear, porque mucha gente los han visto, y de hecho andan armados”. Acciones que considera una injusticia.

Tras casi cinco años de la muerte de Luis Urbano, su padre continúa exigiendo y luchando por justicia, asegura que el estatus procesal lo ve con “mucho retardo y beneficia a quienes incurrieron en el asesinato de mi hijo”. Culminó manifestando que llevará este caso a la Corte Penal Internacional.