Dólar paralelo retomó comportamiento fluctuante tras semanas de estabilidad - Runrun
Dólar paralelo retomó comportamiento fluctuante tras semanas de estabilidad

Tras varias semanas de estabilidad, el precio del dólar estadounidense en el mercado paralelo -referencia de los comerciantes y consumidores- se incrementó 44% entre los días 21 y 28 de octubre al subir de Bs 18 mil a Bs 26 mil, precio que además es el más alto en lo que va de año. El incremento del tipo de cambio no oficial en esos siete días produjo una devaluación –reducción del valor de una moneda respecto a otra– del bolívar de 30,7%.
Según el economista Asdrúbal Oliveros, director de la firma Ecoanalítica, la causa del incremento de la tasa cambiaria en una semana es la misma que impulsó el precio de la divisa en agosto pasado.

“El Ejecutivo inyecta órdenes de pago por casi 800 millardos de bolívares en apenas dos días y el tipo de cambio reacciona con fuerza. Lo que pase con el paralelo de aquí en adelante está atado a la ejecución fiscal”.

En agosto pasado, la tasa cambiaria dio un salto abrupto: aumentó 108%, lo cual disparó los precios de bienes y servicios y duplicó la inflación calculada por la Asamblea Nacional (AN). En ese mes, el indicador de alza general de precios se ubicó en 65,2%, lo que representó un incremento de 31,4 puntos porcentuales respecto a julio cuando se situó en 33,8%, según la Comisión de Finanzas del parlamento.

El Observatorio de Gasto Público de Cedice Libertad reportó que la aceleración del ritmo de variación del tipo de cambio en agosto fue provocado por ingentes pagos de Pdvsa y entes del Estado a sus proveedores, quienes utilizaron los fondos para comprar dólares. Esto hizo que aumentara la demanda en un momento en el que la oferta es irrisoria por el descalabro de la industria petrolera, la principal fuente generadora de divisas del país.

A partir de septiembre el tipo de cambio empezó a bajar hasta ubicarse en los Bs 18 mil a mediados de octubre.

Oliveros indicó que en la semana del 28 de octubre operan dos fuerzas opuestas sobre el tipo de cambio: por un lado, mayor ejecución fiscal y pago a proveedores, un factor que impulsa la demanda; y por el otro, la entrada en vigencia de la nueva medida de créditos tomada por el Banco Central, lo cual puede llevar a empresas a vender algo de dólares para liquidar créditos vigentes.

“El comportamiento que tenga el tipo de cambio estos días, nos dirá cuál fue la más representativa y que termine imponiéndose”.

Resolución

El 28 de octubre entró en vigor la Resolución 19-09-01, publicada en Gaceta Oficial 41742 con fecha del 21 de ese mes, que establece que los créditos comerciales otorgados por las instituciones bancarias deberán ser expresados únicamente mediante el uso de la Unidad de Valor de Crédito Comercial (Uvcc), que será el resultado de dividir el monto del crédito entre el Índice de Inversión, indicador que aumentará dependiendo de si lo hace el precio del dólar oficial, el cual el BCV actualiza todos los días en su página web.

En esencia, la nueva norma ata el crédito al comportamiento del tipo de cambio, por lo que prácticamente desaparecen los incentivos para utilizar el crédito como vehículo para la compra de divisas (cobertura cambiaria), según Oliveros. “En Venezuela el crédito, producto de las distorsiones, era barato. Como todo bien barato, alimentó distorsiones y en esta última etapa, se volvió escaso. Esa época terminó. Ahora el crédito se encarece, por lo que hay que ser muy prudente para tomarlo”.

La tasa de interés anual no podrá exceder del 6% anual ni ser inferior al 4% anual. La medida excluye a las operaciones relacionadas con las tarjetas de crédito, los microcréditos, los préstamos comerciales en cuotas que se otorgan a personas naturales por concepto de créditos nómina, así como los créditos dirigidos a empleados y directivos de las instituciones bancarias y los financiamientos correspondientes a regímenes regulados por leyes especiales.

El director de Ecoanalítica añadió que tres variables son claves a tomar en cuenta: primero, la tasa efectiva que incluye los costos por comisiones y otros; segundo, el impacto en el flujo de caja; y tercero, los escenarios sobre el tipo de cambio. “Un nuevo reto para seguir haciendo negocios en Venezuela”, expresó.