DDHH olvidados | Protestar por los derechos de los trabajadores le salió caro a Eudis Girot - Runrun
DDHH olvidados | Protestar por los derechos de los trabajadores le salió caro a Eudis Girot
El sindicalista Eudis Girot fue detenido arbitrariamente a mediados de noviembre de 2020, luego de participar en protestas para exigir beneficios salariales y laborales

El mismo Eudis Girot advirtió en redes sociales el atropello que cambiaría su vida para siempre. “Hoy 18 de noviembre a las 5 p.m. se presentaron en mi residencia funcionarios del Dgcim con orden de detención en mi contra. Basta de atropello y criminalización de las protestas”, publicó en su cuenta de Twitter en 2020.

Al día siguiente, los efectivos lo sacaron de su vivienda, ubicada en Puerto La Cruz, estado Anzoátegui, y se lo llevaron detenido.  

El lunes 22 de noviembre, sin haber tenido ningún tipo de comunicación con sus abogados o familiares, Girot fue trasladado a Caracas para ser presentado ante el Tribunal Especial Tercero de primera instancia en funciones de control con competencias en delitos ascoiados al terrorismo. 

Arelys Ayala, su abogada y miembro de la ONG Foro Penal, informó que Girot había sido acusado de asociación para delinquir, conspiración, divulgación de información confidencial y terrorismo. 

¿Qué hacía Eudis Girot?

Eudis Girot es director ejecutivo de la Federación Unitaria de Trabajadores Petroleros de Venezuela (Futpv). El sindicalista emitía semanalmente una actualización del estado de las refinerías e informaba sobre la lucha que llevaba adelante junto a los trabajadores petroleros que claman por mejores salarios y denuncian la crisis de Petróleos de Venezuela (Pdvsa). 

En los meses previos a su detención, el sindicalista había encabezado varias manifestaciones regionales y estatales en exigencia de beneficios salariales y mejores condiciones laborales para los trabajadores de la industria petrolera. También, había denunciado presuntos casos de corrupción vinculados a mafias de combustible de petroleras del país.

En una audiencia el 27 de noviembre, sólo una semana después de su arresto, el fiscal Yorman Flores dijo que los funcionarios de la DGCIM), que investigaban un supuesto complot para desestabilizar la industria petrolera, encontraron tuits de la cuenta de Girot que “reveló información estratégica” de Pdvsa

Flores acusó a Girot de enviar “mensajes para crear conmoción y zozobra en la población en relación a la escasez de combustible”, según una transcripción del tribunal vista por Reuters.

“Sabemos lo sensible que (es) para la población el tema de la falta de combustible”, dijo Flores en un tribunal contra el terrorismo en Caracas, en el que pidió prisión preventiva para Girot. “El ventilar este tipo de información a través de una red social, y dado el cargo que desempeña el ciudadano acá presente (…) podría otorgarle cierta credibilidad”.

Libertad a medias

Eudis Girot fue detenido arbitrariamente y estuvo preso por 17 meses. En ese tiempo, estuvo en cuatro lugares de reclusión distintos: sede de la Dgcim en Puerto La Cruz, luego en la sede de Boleíta en Caracas en la cárcel de El Rodeo II en Guatire y más recientemente en La Planta en Caracas.  

El pasado 7 de abril, en la espera de una audiencia de juicio que fue suspendida en los tribunales del Palacio de Justicia, efectivos de la Guardia Nacional lanzaron una bomba lacrimógena en la celda en la que se encontraba junto al otro preso político Rodney Álvarez, recientemente excarcelado.

Los familiares de Girot denunciaron que estuvo a punto de morir, pues la inhalación de esos gases tóxicos le produjo una arritmia cardíaca severa. “Un guardia nacional lanzó una bomba lacrimógena, poniendo en riesgo su vida. Esta es la segunda oportunidad en que los cuerpos de seguridad ponen en riesgo la vida de Eudis”, señaló su esposa en ese momento.

Diversos movimientos de trabajadores informaron el 25 de abril que el preso político Eudis Girot había sido liberado. El Partido del Trabajo y la organización Democracia Sindical aseguraron que la libertad del trabajador petrolero se dio tras una audiencia del juicio, donde también estaba siendo acusado de porte ilícito de armas.

Al dirigente gremial se le dictó medidas sustitutivas de libertad con régimen cautelar. A Girot le desestimaron casi todos los cargos en su contra, excepto el de instigación. 

“Eudis fue condenado a tres años por esa causa que le queda, más se le dio esa medida cautelar de presentación cada 30 días ante en tribunal y prohibición de salida del país. Como la instigación es un delito más leve, el juez le dio la medida de presentación para que pueda irse a su casa», dijo Rosario Ríos, esposa del sindicalista. 

Asimismo, dijo al día siguiente de su liberación que Girot aún se encontraba “consternado” y convaleciente por varias crisis de salud durante su reclusión, por lo que pronto tendría visita médica. 

“Está esperando para ir al médico y restablecerse por completo; pero fuerte de espíritu y con la valentía que Dios le ha dado, convencido de lo que hemos hecho es correcto. De que luchar por Venezuela es lo correcto”.

Su liberación se dio en medio de una visita de una comisión de alto nivel de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) que ha solicitado, desde hace varios años, la liberación de todos los trabajadores presos por razones políticas.

La vida ya no es la misma

En una entrevista en el programa “Vladimir a la Carta”, Eudis Girot contó su experiencia como preso político venezolano por más de año y medio. Dijo que luego de una experiencia así, “se entra en un proceso nuevo que transforma la percepción de toda una vida”. 

“La gente ni se imagina”, expresó. Cree que esos 17 meses de detención lo transformaron, dejando atrás la “efervescencia” con la que discutía sobre temas relacionados al rescate de la empresa petrolera y asumiendo actualmente una actitud más reflexiva al respecto.

Girot señaló que toda esa situación le hizo sentir “compungido” debido a que no solo la detención afecta a una persona en específico, sino a toda una familia. “Te consigues con situaciones que te buscan convertir en despojo humano, pero hay que resistir con dignidad”. 

Denunció que en El Rodeo II existe una situación delicada con los reclusos que ahí se encuentran hacinados por problemas de salud como la tuberculosis, por lo que solicitó al Ministerio de Asuntos Penitenciarios que tome cartas en el asunto.

Asimismo, el sindicalista comentó que sufrió malos tratos desde el primer momento en el que los efectivos de la Dgcim fueron a su vivienda para llevárselo detenido. 

“La persona piensa que el maltrato físico es desde el primer golpe. Eso procede desde la primera mirada de los funcionarios de los cuerpos de seguridad que llegan a tu casa y entran. Que te llevan escoltado a un centro de reclusión. Ahí comienza el maltrato; eso que sientes cuando entra la llave en la cerradura de un candado, entra incertidumbre (…) de si es entrevista o maltrato”. 

A pesar de lo vivido, dijo que este tipo de situaciones lo ayudaron a formar un “temple de hierro” para seguir trabajando en pro de cambios que beneficien a los venezolanos.

Comentó que unos días después de haber sido excarcelado, le fue extendida una invitación de la comisión de encuestas de la OIT para escuchar su caso y conocer su versión de la realidad de los trabajadores desde la perspectiva de una víctima de prisión arbitraria.