Los activistas por los derechos humanos fueron detenidos en julio de 2021, acusados de terrorismo, incitación al odio y traición a la patria
La ONG venezolana Fundaredes denunció este domingo el deterioro de la salud de su director, Javier Tarazona, detenido en julio pasado y que se había convertido en la principal voz de denuncia del conflicto que estalló en una región limítrofe entre las Fuerzas Armadas y grupos disidentes de las FARC.
«Debido a sus condiciones de reclusión a Javier Tarazona se le ha deteriorado su salud. Él tiene enfermedades base diagnosticadas previas a su detención, una de ellas arritmia cardiaca», escribió la organización en su cuenta de Twitter.
Amnistía Internacional catalogó a Tarazona en diciembre pasado como «preso de conciencia» y reclamó su liberación.
La Justicia venezolana confirmó el pasado 9 de diciembre el pase a juicio de Tarazona, quien fue detenido junto a su hermano Rafael Tarazona y al también activista Omar de Dios García, quienes pasarán a juicio, si bien ninguno de los dos se encuentran actualmente en prisión.
Los tres miembros de Fundaredes fueron detenidos el pasado 2 de julio, cuando acudieron a la sede de la Fiscalía en Coro a denunciar que estaban siendo víctimas de acoso y persecución por funcionarios de la Policía, agentes del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin) y sujetos sin identificar, según denunció entonces Fundaredes.
Todos ellos están acusados de terrorismo, incitación al odio y «traición a la patria».