Incluso hasta los aliados del Gobierno, como el propio Partido Comunista, entienden que esto ya no hay manera de defenderlo
OTRA VISIÓN
Aparte de la división tan lamentable (y sin ningún escrúpulo), a la oposición le ha faltado una estrategia de la defensa del derecho al voto, pues se han regodeado en la crítica y la denuncia del Gobierno como dictadura, pero no dicen cómo se sale del régimen y cómo se lucha contra una dictadura.
El gobierno de Maduro tiene un discurso que pretende conectar con las necesidades de la gente, necesidades que no han sido atendidas y respondidas en estos 20 años que han estado en el Gobierno; y vemos entonces alcaldes que hablan de que ahora sí van a enfrentar el problema de electricidad, que ahora sí habrá respuesta al tema del agua, al tema de la vialidad y todo un etcétera.
Por todo esto está claro que incluso hasta sus aliados, como el propio Partido Comunista, entienden que esto ya no hay manera de defenderlo; que hay un desgaste muy grande, que hay un hartazgo, un rechazo en la gente a la gestión de Gobierno. Hasta el mismo PCV sabe que no hay manera de promover o de vender la idea de la continuidad como algo positivo, sino que hasta ellos mismos tienen que buscar alguna manera de apostar por una renovación ante una crítica generalizada de que el Gobierno está muy mal. En todas las encuestas la gente los señala como los principales responsables de la crisis.
¿148 AÑOS DE ROJO RETROCESO?
Solo saber que la historia nos relata que fue el 28 de octubre de 1873 el día en que Venezuela conoció por vez primera la luz eléctrica en la ciudad de Caracas nos llena el tiempo presente de indignación. Señalan que un científico venezolano muy destacado del siglo XIX, Vicente Marcano, utilizó un dinamo impulsado por una máquina de vapor para iluminar la plaza Bolívar.
Hoy vemos, asombrados todos, cómo gobernadores y alcaldes del PSUV ofrecen la luz eléctrica como una de sus promesas electorales. Hay ciudades que pasan de 80 días de apagones intermitentes y otras donde la oscuridad reina con una frecuencia interdiaria. Hasta Caracas, otrora cuidada para no despertar reacciones populares, sufre igual que el resto del territorio.
LAS CIFRAS EN BAJADA
Desde que Chávez prometió en una de las contiendas electorales obtener 10 millones de votos y logró unos 8, las cifras del chavismo han venido bajando hasta 6 millones en 2018 y 4 millones en 2020. Por ello las cifras que obtenga el régimen venezolano en 2021 indicarán si la pérdida de apoyo sigue en aumento. He allí la posibilidad de que los opositores puedan hacerse de algunas alcaldías y gobernaciones que han estado en manos rojas sin lograr el respaldo popular ante el olvido de promesas y compromisos.
