Edward Ocariz: un defensor de DDHH víctima de la represión poselectoral
Edward Ocariz está recluido en la cárcel de Tocuyito, en Carabobo, desde el 9 de agosto. Desde su detención no ha podido recibir visitas y mucho menos le han permitido el acceso a una defensa privada. Su familia exige el respeto al debido proceso
La represión que se produjo tras las elecciones presidenciales ha dejado más de 1400 personas detenidas, de acuerdo con el Foro Penal Venezolano. Estas detenciones arbitrarias incluyen a periodistas, activistas y defensores de los derechos humanos. Uno de ellos es Edward Ocariz, miembro del Comité de Derechos Humanos de la parroquia Coche, en Caracas.
Ocariz fue detenido el pasado viernes 2 de agosto aproximadamente a la 1:00 de la tarde mientras estaba en su casa cocinando el almuerzo. Un grupo de funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), completamente encapuchados, ejecutaron esta detención sin tener ninguna orden para hacerla.
#Sucesos | Se reportó el secuestro del activista de derechos humanos, Edward Ocariz, en su vivienda en Coche, Caracas.
Denunciaron que esto es parte de un plan del gobierno para detener a los jefes del Comando Venezuela y testigos de mesa. #3Ago – Carla Angola pic.twitter.com/Gwxln7dEhO
— LLanero Digital (@LlaneroDigitalV) August 3, 2024
Casualmente, el día de su detención, el Consejo Nacional Electoral (CNE) emitió su segundo boletín de las elecciones presidenciales -todavía sin presentar los resultados mesa por mesa- y nueve excandidatos acudieron al Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) ante una convocatoria que hizo la Sala Electoral por un recurso de amparo interpuesto por el gobernante Nicolás Maduro.
A Edward Ocariz, que también es dirigente de Primero Justicia, le imputaron los delitos de obstrucción a la vía pública, terrorismo e incitación al odio. Estas acusaciones son rebatidas por su hermana Mileydi Ocariz, quien afirma que su hermano no ha cometido ningún delito. Incluso, dijo que en la parroquia donde vive Edward los habitantes hicieron unos rezos para orar por su liberación.
Tras su detención, el activista fue recluido en la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) en El Helicoide. En la madrugada del 3 de agosto lo trasladaron a la sede de la PNB en Maripérez y posteriormente a la Zona 7 de Boleíta. Ya el 9 de agosto, Edward Ocariz fue trasladado al Internado Judicial de Carabobo, conocido como la cárcel de Tocuyito. Días antes Nicolás Maduro dijo que estaban acondicionando este recinto carcelario y Tocorón -ubicado en Aragua- para recluir a los detenidos en manifestaciones.
@nicolasmadurom Todos los criminales fascistas se van para Tocorón y Tocuyito, a cárceles de máxima seguridad para que paguen sus crímenes ante el pueblo.
Sin visitas ni acceso a defensa privada
En entrevista con Runrun.es, Mileydi Ocariz, hermana de Edward, relató la odisea que ha tenido que vivir luego que su hermano fuese detenido. Ella vive en Anzoátegui y tuvo que viajar hasta Caracas cuando supo la noticia de la detención de Edward.
Hasta ahora, a casi 15 días de su detención, no ha podido ver a su hermano, quien padece de artritis reumatoidea, problemas en la piel y es hipertenso. “No permiten visitas, alegando que debemos esperar 45 días para poder visitarlo. Todos los insumos que le llevé los recibieron, pero nadie me asegura de que los recibirá. Debo confiar que así será”, señaló.
Mileydi tiene 64 años y es la única persona a cargo de la situación de su hermano. Su padre tiene 89 años, ya es una persona muy mayor. “Mi papá vive conmigo y tuve que dejarlo en otro sitio para poder venir yo acá y dejar mi casa abandonada. Es muy fuerte”.
Según le dijo la representante de Tocuyito a la hermana de Edward, los detenidos en ese recinto carcelario “están bien, en un salón que se habilitó para ellos, cuentan con agua, luz baño, ducha y se les provee de sus 3 comidas”, pero nada le asegura a Mileydi que esto sea realmente así en la práctica.
Preguntó por los pasos para ofrecerle a su familiar una defensa privada -derecho que hasta ahora le han negado- y solo le indicaron que debía hablar con un abogado, preparar un escrito, llevarlo al centro penitenciario y que Edward lo firme aceptando un abogado defensor.
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Una vida dedicado a ayudar a otros
Edward Ocariz tiene 53 años. Según su hermana, siempre se dedicó a la protección de animales. Nunca fue una persona conflictiva.
“Él se crió aquí, en donde lo vinieron a sacar. Lo sacaron sin ninguna orden. Se ha dado a conocer por su parte humanitaria. Él es defensor de los derechos humanos. Es un colaborador donde vive y ayuda a quien puede ayudar”, relató su hermana.
Mileydi enfatizó que su hermano Edward nunca ha hecho nada fuera del marco legal, por el contrario, es un hombre que está pendiente de mejorar.
“Edward se dedicaba a hacer operativos para preparar comida para llevar a los presos. Visitaba los puestos de policía y le llevaba comida a los detenidos. Trataba de llevarles medicamentos, o sea, Edward se ha metido en todas esas cuestiones y por eso es conocido en algunas jefaturas policiales, porque él iba a cooperar con los detenidos”, agregó su hermana.
Mileydi Ocariz sabe que su hermano es militante de Primero Justicia, pero insiste en que formar parte de una organización política no es un delito.
La odisea familiar
La hermana de Edward fue a Tocuyito para llevarle algunos insumos y el trajín del viaje “es agotador”, según describe. Tuvo que estar desde las 10:00 de la mañana hasta las 4:00 de la tarde aguantando bajo el fuerte sol y la lluvia. Además, el gasto que genera hacer este viaje es muy alto, porque también tiene que invertir en uniformes.
“Te piden uniforme. Tengo que comprarle uniforme ahorita. Estoy viendo cómo hago para comprarle el uniforme que están exigiendo ellos allá”, relató Mileydi Ocariz, agregando que debe llevarle prendas como pantalón de mono de un color específico, short, franela, medias y zapatos. Todo eso es costoso para ella.
Mileydi es pensionada y algunos familiares y amigos le han hecho aportes, pero eso no es suficiente para cubrir todas las exigencias. “Aparte de que lo tienen detenido violando todos sus derechos, pues también se suman los gastos que uno tiene que asumir como persona y como familia”, reclamó.
Tanto su hermana como su familia exigen a la administración de Nicolás Maduro la liberación de Edward Ocariz. También, piden el cumplimiento y respeto al debido proceso, que se le permita una defensa privada, saber de su salud física y mental, y “el respeto que se merece como líder comunitario, ya que no es un delito ejercerlo”.
