Trump dijo que su mandato estaba terminando y que la transición sería ordenada. El reconocimiento de Trump se produjo después de un día de caos y destrucción en Capitol Hill cuando sus partidarios irrumpieron en el Capitolio

Cuatro personas perdieron la vida en la toma violenta del Capitolio. Una mujer recibió un disparo de un oficial fuera de la Cámara y otras tres murieron en “emergencias médicas” durante la ocupación del edificio

A continuación presentamos los eventos clave de la jornada del miércoles 6 de enero:

El presidente Donald Trump reconoció por primera vez su derrota en las elecciones del 3 de noviembre y anunció que habría una “transición ordenada el 20 de enero”, después de que el Congreso concluyera el conteo de los votos electorales el jueves temprano certificando la victoria del presidente electo Joe Biden. 

El reconocimiento de Trump se produjo después de un día de caos y destrucción en Capitol Hill cuando sus partidarios irrumpieron en el Capitolio, obligaron a los miembros a esconderse y detuvieron el conteo formal del Congreso durante más de seis horas.

La cuenta personal de Twitter de Trump fue bloqueada por 24 horas por la empresa de redes sociales por publicar mensajes que parecían justificar el asalto a la sede de la democracia de la nación.

Cuatro personas murieron durante la violencia. Una mujer recibió un disparo de un oficial fuera de la Cámara y otras tres murieron en “emergencias médicas” durante la ocupación del edificio, Washington, DC, dijo la policía.

“Estas son las cosas y los eventos que suceden cuando una victoria electoral sagrada y aplastante es despojada de manera tan brutal y sin ceremonias de los grandes patriotas que han sido tratados de manera mala e injusta durante tanto tiempo”, escribió Trump en un mensaje que luego fue eliminado por Twitter y Facebook. 

Trump pasó gran parte de la tarde del miércoles viendo la insurrección por televisión desde su comedor privado frente a la Oficina Oval. 

Mike Pence anunció que no revocaría la voluntad de los votantes en el conteo electoral del Congreso. 

La violencia, junto con la tibia respuesta del presidente, alarmó a muchos en la Casa Blanca y pareció llevar a muchos republicanos al límite después de años de lealtad a Trump.

Stephanie Grisham, jefa de gabinete de la primera dama y exsecretaria de prensa de la Casa Blanca, presentó su renuncia el miércoles, pero se negó a decir qué la motivó.

El asesor adjunto de seguridad nacional Matt Pottinger, el secretario social de la Casa Blanca Rickie Niceta y la subsecretaria de prensa Sarah Matthews también renunciaron.

 Pence, no Trump, fue quien habló con el secretario de Defensa en funciones para discutir la movilización de la Guardia Nacional de DC el miércoles por la tarde a fin de restablecer el orden en el Capitolio. 

Trump grabó un video alentando el fin de la violencia. La publicación se produjo ante la insistencia del personal y en medio de crecientes críticas de los legisladores republicanos que lo instaban a condenar la violencia perpetrada en su nombre.

Horas antes de los eventos violentos, Trump había aparecido en un mitin masivo cerca de la Casa Blanca, donde continuó instando a sus seguidores a luchar contra los resultados de las elecciones y los alentó a marchar hacia el Capitolio. En un momento, incluso sugirió que podría unirse a ellos, una perspectiva que fue discutida por la Casa Blanca pero finalmente abandonada.

Numerosos miembros del partido republicano, entre ellos Marco Rubio, Mike Gallagher, Alyssa Farah y Mick Mulvaney instaron públicamente a Trump a que ayudara a restablecer el orden. 

Pence fue conducido fuera de la cámara del Senado a un lugar seguro cuando los manifestantes irrumpieron en el edificio, también pidió que los manifestantes se dispersaran. “La violencia y la destrucción que tienen lugar en el Capitolio de los Estados Unidos deben detenerse y deben detenerse ahora”, tuiteó. “Todos los involucrados deben respetar a los agentes del orden y abandonar el edificio de inmediato”.