Cáncer de próstata: vencer la resistencia a la evaluación urológica es vital para prevenirlo - Runrun
Cáncer de próstata: vencer la resistencia a la evaluación urológica es vital para prevenirlo
En el mes de noviembre, que se considera internacionalmente como el mes de la salud masculina, el mensaje del control y la prevención cobra relevancia, porque el cáncer de próstata es el más frecuente en hombres venezolanos y el que más muertes causa
Los tabúes acerca de estudios como el tacto rectal pueden retrasar la visita al urólogo . Con ello, se pierde la posibilidad de diagnosticar de forma temprana un cáncer de próstata
“El miedo a hacerse el tacto rectal es un tabú, los pacientes piensen que van a perder la hombría si se hacen el estudio, pero no es así y deben hacerse este examen si lo indica el médico», explicó una experta en Urología
La Sociedad Anticancerosa de Venezuela recomienda comenzar la pesquisa de cáncer de próstata a partir de la cuarta década de la vida, porque el diagnóstico temprano permite iniciar el tratamiento oportuno “con probabilidad de que sea 100% curativo”
En algunos casos, el valor del antígeno prostático no se puede considerar como definitivo para diagnosticar o descartar un cáncer de próstata. Por eso, se debe recurrir a exámenes  como el tacto rectal y biopsias
En Venezuela existen métodos de última generación y mínimamente invasivos, como la plataforma Focalyx y la cirugía robótica con el Robot da Vinci, para diagnosticar y tratar el cáncer de próstata

 

Por: @MrsYaky

 

En los hombres, los tabúes culturales pueden retrasar la visita al urólogo para diagnosticar a tiempo el cáncer más frecuente y el que causa más muertes en Venezuela en este sector de la población: el cáncer de próstata.

Es el caso de Álvaro Corrales. A sus 48 años, este caraqueño admite que nunca se ha hecho un antígeno prostático y que no ve como una prioridad la visita anual al urólogo. Después de varias preguntas y de esgrimir que la crisis económica hace que destine sus recursos a asuntos “verdaderamente necesarios”, se sincera y comenta: “El solo hecho de pensar en un tacto rectal me hace sentir incómodo”.

El cáncer es una enfermedad curable si se diagnóstica a tiempo y si se inicia un tratamiento oportuno. Durante años, la Sociedad Anticancerosa de Venezuela ha repetido esta frase para promover la visita anual al médico tanto en mujeres como en hombres. En el mes de noviembre, que se considera internacionalmente como el mes de la salud masculina, el mensaje del control y la prevención cobra relevancia.

En Venezuela, el más reciente Estudio de los Pronósticos de la Mortalidad e Incidencia del Cáncer 2021, encontró que, al año, mueren 3.792 pacientes por cáncer de próstata en Venezuela y que se diagnostican más de 8.000 casos anuales.

“Eso significa que cada día están muriendo 10 pacientes con ese tipo cáncer y que cada día estamos diagnosticando 23 casos nuevos”, comentó a Runrun.es el doctor Juan Saavedra, gerente general de la Sociedad Anticancerosa de Venezuela.

 

Desde 2003, inició en Australia el movimiento «Movember» para concientizar a los hombres en el mes 11 del año sobre los riesgos del cáncer de próstata, testículo, la prevención del suicidio y el cuidado de la salud mental. Los mensajes enfocados en la prevención de la salud masculina cobran relevancia en este mes.

Por ello, la intención de divulgar las cifras  del cáncer de próstata en Venezuela no es crear alarma, sino motivar al hombre a acudir a la consulta urológica.

Saavedra dijo que, por temas culturales, el hombre venezolano mantiene reticencia a someterse a una exploración urológica, específicamente al estudio del tacto rectal.

Johanna Arias, especialista en Urología de la Clínica de Prevención del Cáncer, recordó que “el cáncer no duele”. “Y cuando produce dolor, es porque está invadiendo otros órganos, porque está avanzando. De allí la importancia de hacer los exámenes diagnósticos al menos, anualmente”, recomendó la médico en una cápsula audiovisual de salud masculina, publicada por la SAV en su cuenta en Instagram.

“El miedo a hacerse el tacto rectal es un tabú, los hombres piensen que van a perder la hombría si se hacen el estudio, pero no es así y deben hacerse este examen si lo indica el médico. Porque el cáncer de próstata no eleva el antígeno prostático en las primeras fases. Si se detecta a tiempo, el cáncer de próstata puede recibir tratamiento farmacológico y se puede ordenar la cirugía, si se requiere”, abundó.

 
 
 
 
 
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La mortalidad ocurre en edades más avanzadas

Si bien el cáncer de próstata tiene alta frecuencia y elevada mortalidad en Venezuela, las muertes no ocurren generalmente en grupos muy jóvenes, como sucede en otros tipos de cáncer.

“Aunque puede iniciar cerca de los 55 años, la mortalidad es más alta después de los 65 años en adelante, o a partir de los 70. A diferencia de otros tipos de cáncer en la mujer, como el de mama y cuello uterino, que aparecen en mujeres más jóvenes y las muertes también pueden ser en edades muy tempranas”, explicó Saavedra.

La Sociedad Anticancerosa de Venezuela recomienda comenzar la pesquisa de cáncer de próstata a partir de la cuarta década de la vida, porque el diagnóstico temprano permite iniciar el tratamiento oportuno “con probabilidad de que sea 100% curativo”, destaca Saavedra.

Y esto es porque en el cáncer de próstata los factores de riesgo más importantes no son controlables, como la raza (aparece más en afroamericana y en el hombre caribeño) y la edad.

“Un hombre puede controlar el sobrepeso, la obesidad, vigilar su alimentación y hacer actividad física. Pero, para infortunio, los factores de riesgo más importantes para este tipo cáncer son los no controlables. Por ello, se debe comenzar con el antígeno prostático y el tacto rectal, con ambos estudios, uno solo no es suficiente”, explicó Saavedra.

Ocurre que el antígeno prostático, una prueba sanguínea que mide la cantidad de una proteína producida por el tejido canceroso y no canceroso en la próstata, puede aumentar por otras razones no cancerosas, como el aumento benigno del tamaño de la próstata, infecciones urinarias y otras condiciones, como la prostatitis.

“Si combino esa prueba con el tacto rectal, aumenta la capacidad diagnóstica. Es importante combinar antígeno, tacto rectal, y eventualmente, se piden otros exámenes de complemento, como una biopsia. Si en el examen físico se constata la presencia de una próstata dura y leñosa, más el antígeno alto, podemos estar ante un probable cáncer de próstata y se debe hacer la biopsia”, apuntó.

2 de cada 10 tumores se esconden bajo antígenos normales

Algunos hombres toman la decisión unilateral de “controlar” su riesgo de cáncer de próstata monitoreando el valor del antígeno prostático. Y si este indicador se encuentra en valores normales, asumen que no es necesario acudir al especialista porque no hay riesgo de cáncer de próstata.

Pero, como se dijo antes, este valor no es definitivo para diagnosticar o descartar la enfermedad.

“Aunque el antígeno prostático es la prueba madre para el diagnóstico del cáncer de próstata, es importante saber que hasta 20% de los tumores localizados en próstata tienen
antígenos normales, por lo cual es importante acudir a un especialista en urología, quien realiza una evaluación completa del aparato genito-urinario y quien también está facultado para descartar cáncer de riñón y cáncer de vejiga”, explicó el especialista en Urología Oncológica y Cirugía Robótica, Gastone Valongo, en una nota de prensa.

 

 
 
 
 
 
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El doctor Valongo recomienda que la visita al urólogo inicie a los 40 años y con una frecuencia anual, aun cuando no se presente ningún síntoma. Y, con más razón, si se tiene antecedentes familiares directos –padres o hermanos- con cáncer de próstata, ya que la probabilidad en estos pacientes es 2,5 veces mayor que en el resto de la población.

Vida saludable, control e ignorar los mitos

Además de la visita anual al urólogo a partir de los 40 años de edad, es importante que el hombre se alimente de manera saludable y balanceada a diario, incluyendo frutas, verduras, granos integrales, vitaminas y minerales.

También, debe mantener un peso saludable y hacer algún tipo de actividad deportiva o física, recomendó César Miranda, experto en educación y prevención del cáncer

Miranda, quien presidió durante más de ocho años la gerencia de educación y prevención de la SAV, recordó que el tabaquismo, el consumo de alcohol de manera habitual, sedentarismo y dietas con alto contenido de grasas pueden incidir en el aumento del riesgo de padecer este u otros tipos de cáncer.

Agregó que la visita al urólogo siempre será el camino más adecuado para que el hombre aprenda sobre sus cambios en la próstata y reciba orientación sobre las pruebas o chequeos a realizar.

“Este profesional y su equipo se convertirán en su mejor orientador, calificado y experto, para contestar sus preguntas, atender sus preocupaciones, encontrar el mejor tratamiento, de ser el caso y, cuidar de la salud de su próstata”, acotó.

La orientación de los expertos es fundamental para derribar mitos y bulos, que en el caso del cáncer de próstata, no faltan. De hecho, en algunas redes sociales se han popularizado movimientos que asocian la frecuencia o no de las relaciones sexuales y la práctica de técnicas como la masturbación con un mayor o menor riesgo de padecer cáncer de próstata.

El doctor Juan Saavedra, gerente general de la Sociedad Anticancerosa de Venezuela, aclara que estos son solo mitos. “No se ha demostrado científicamente que las frecuentes o infrecuentes relaciones sexuales, sean de la naturaleza que sean –incluida la masturbación- estén relacionadas con mayor o menor riesgo de cáncer de próstata. No hay evidencia de que su aumento o disminución aumenten o disminuyan el riesgo”, sostuvo.

Es importante derribar estos mitos pues, quienes caen en ellos, pueden desviar la atención de lo que es verdaderamente importante: la consulta urológica anual.

Métodos de última generación contra el cáncer de próstata

En Venezuela, actualmente se cuenta con métodos avanzados para diagnosticar y tratar el cáncer de próstata con precisión, que favorecen tanto la recuperación del paciente como la conservación de sus funciones sexuales y urinarias.

Entre esos métodos de última generación y mínimamente invasivos se encuentran Focalyx y la cirugía robótica con el Robot da Vinci.

Médicos del Centro Médico Docente La Trinidad, en actividad con periodistas para explicar bondades del Robot Da Vinci

Focalyx es una plataforma que, además de usarse para el diagnóstico del cáncer de próstata, en casos seleccionados también permite tratar la enfermedad.

“Por ejemplo, cuando hacemos 20 punciones en una biopsia y solamente salen positivas 2 o 3. En esos casos, se puede proceder de forma local y conservar la función urinaria y la función sexual. Se trata de un tratamiento localizado y de mínima invasión, sin entrar a quirófano, para tratar una enfermedad que se detectó muy precozmente”, explicó el especialista en Urología, Gastone Valongo.

El Focalyx combina imágenes extraídas de la resonancia magnética multiparamétrica con las obtenidas en una ecografía, para dirigir la biopsia a puntos exactos donde se encuentra el tumor.  Posteriormente, con láser o criocirugía y sin ir a quirófano, se pueden tratar focalmente las lesiones. 

Si el paciente no califica para este tipo de tratamientos focales, la cirugía robótica es otra opción innovadora disponible que reporta múltiples beneficios.

“El paciente se recupera rápidamente a través de una intervención que es mínimamente invasiva, poco dolorosa y con una reducción significativa de los efectos colaterales o las posibles complicaciones de la cirugía urológica tradicional”, agregó Valongo.

La visión del médico en la cirugía robótica es en tres dimensiones  y el aumento de las estructuras es de diez a doce veces mayor. Además, de la consola de control, el equipo cuenta con una cámara móvil que permite el acceso a las partes más remotas o difíciles de llegar.

«Eso permite respetar mejor las estructuras, manipularlas de forma más segura, puedes preservar mejor los vasos sanguíneos, nervios y los tejidos que quieres preservar. La cirugía, entonces, es menos invasiva, con menos sangramiento, el paciente se recupera más rápidamente y los efectos colaterales son menores», explicó Valongo en una actividad con periodistas el pasado mes de septiembre.