20 países firmaron un acuerdo para frenar la migración irregular - Runrun
20 países firmaron un acuerdo para frenar la migración irregular
En el acto de firma de la cumbre, el mensaje de Joe Biden fue rotundo: su prioridad es «detener las formas peligrosas e ilegales en las que está migrando la gente» en la región

 

Este viernes, 10 de junio, 20 países se comprometieron a expandir las oportunidades de migrar legalmente y reforzar la cooperación regional para contener la creciente llegada de indocumentados a la frontera de Estados Unidos y otros países, como Colombia, Ecuador o Costa Rica.

La llamada Declaración de Los Ángeles sobre migración y protección, una suerte de código de conducta continental en temas migratorios, se rubricó en un acto presidido por el presidente estadounidense, Joe Biden, en la última jornada de la IX Cumbre de las Américas, celebrada en la capital californiana.

Entre los países que apoyaron el acuerdo están Estados Unidos, México, Guatemala, Honduras, El Salvador, Haití, Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Paraguay, Perú, Uruguay, Costa Rica, Belice, Panamá, Canadá, Jamaica y Barbados. Mientras que Cuba, Venezuela y Nicaragua no rubricaron la declaración debido a que no fueron invitados a la Cumbre de las Américas por considerar que no son democráticos.

El mensaje de Biden

En el acto de firma de la cumbre, el mensaje del mandatario norteamericano fue rotundo: su prioridad es «detener las formas peligrosas e ilegales en las que está migrando la gente» en la región.

«La migración ilegal no es aceptable, y vamos a asegurar nuestras fronteras», advirtió un presidente que ha recibido críticas por mantener en pie el llamado Título 42, una medida amparada en la pandemia por la que EE.UU. deporta automáticamente a la mayoría de los indocumentados que llegan a su frontera sur.

Aunque Biden anunció este año su intención de levantar esa medida, un juez federal le ha obligado a mantenerla en vigor de momento, y aunque esa norma impide solicitar asilo a la mayoría de quienes llegan, el flujo no ha hecho sino aumentar, con una caravana de 15.000 personas avanzando esta semana por el sur de México.

Compromisos en la cumbre

Los países firmantes de la declaración se comprometieron a «fortalecer y expandir las vías de migración mediante programas de trabajo temporal», además de los programas de reunificación familiar y la regularización de migrantes, con algunos compromisos concretos.

México lanzará un nuevo programa de trabajo temporal para dar oportunidades a entre «15.000 y 20.000 trabajadores de Guatemala» cada año, con la intención de ampliarlo a medio plazo para incluir también a Honduras y El Salvador.

Además, México integrará 20.000 refugiados en el mercado laboral formal dentro de los tres próximos años, con el apoyo del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).

Por su parte, Canadá reafirmó que planea recibir este año más de 50.000 trabajadores agrícolas de México, Guatemala y el Caribe; mientras que España -país observador- ha accedido a «duplicar» el número de vías legales para que los trabajadores hondureños participen en los programas circulares de migración españoles.

Estados Unidos se comprometió además a ampliar hasta 20.000 su cuota de refugiados de las Américas para 2023 y 2024, con especial prioridad a los haitianos; y anunció 314 millones de dólares en ayuda humanitaria para venezolanos dentro y fuera de su país.

Costa Rica prometió renovar el estatus de protección temporal especial para los migrantes de Venezuela, Nicaragua y Cuba que hubieran llegado antes de marzo de 2020, y Biden agradeció en particular los esfuerzos que ha hecho ese país y los de Ecuador.

El presidente ecuatoriano, Guillermo Lasso, destacó durante el acto que es «urgente promover oportunidades de desarrollo en países de origen, por una parte, y por otra impulsar acciones para identificar y desarticular las mafias internacionales que controlan la migración irregular».

Migración venezolana hacia EEUU ha tomado fuerza por barreras en Latinoamérica

Según la Plataforma de Coordinación Interagencial para Refugiados y Migrantes de Venezuela, coliderada por la Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), hasta el 8 de febrero de 2022 unos 6.041.690 venezolanos habían dejado su país.

De estos, 4.992.215 estaban en América Latina y el Caribe, principalmente distribuidos en Colombia (1,8 millones), Perú (1,3 millones), Ecuador (508.900) y Chile (448.100).

«En estos países la pandemia generó a partir de 2020 un movimiento pendular desde y hacia Venezuela porque las condiciones económicas y la regularización se complejizaron», dijo a Efe Donna Cabrera, docente, investigadora y consultora en migraciones internacionales.

Una de las razones del movimiento pendular en la migración es, en el caso de Suramérica, la expectativa por el curso que tomará la situación de los venezolanos tras el cambio de timón en los Gobiernos de Perú y Chile, y Colombia.

«Los nuevos presidentes y su visión sobre la migración y la manera cómo se integran los migrantes y refugiados venezolanos van a tener un fuerte impacto en la movilidad de estas personas por la región», aclaró Cabrera.

Ya el mandatario peruano, Pedro Castillo, hizo sonar las alarmas el 28 de julio de 2021 al afirmar durante su posesión: «Los delincuentes extranjeros tendrán 72 horas de plazo a partir de la fecha para salir del país».

Aunque el toque xenófobo de estas palabras hizo que los venezolanos pensaran lo peor, lo cierto es que el regreso a su patria está lejos de ser masivo.

«Las estimaciones indicarían que unas 500 personas estarían saliendo diariamente de Perú por la frontera norte, en Tumbes, mientras que los ingresos diarios siguen superando las 1.200 personas», declaró a Efe el representante de Acnur, Federico Luis Agusti.

Para el presidente de la Unión Venezolana en Perú, Óscar Pérez, otro factor relevante en el movimiento migratorio son las multas «desproporcionadas» que se imponen a quienes no prorrogaron a tiempo su residencia.

*Con información de EFE