Aumenta el número de menores venezolanas rescatadas de redes de trata de personas - Runrun
Aumenta el número de menores venezolanas rescatadas de redes de trata de personas
“La oficina del Delito de las Naciones Unidas dice que por cada víctima identificada, hay 20 que permanecen ocultas
La pandemia de COVID-19 puso en situación más vulnerable a las niñas y adolescentes por falta de escolaridad, que puede derivar en inseguridad económica y limitada autonomía

@ValeriaPedicini

517 mujeres venezolanas fueron rescatadas de redes de trata de personas durante el año 2020, según registró el informe “Libres y Seguras” de la organización civil Mulier Venezuela, presentado en el III Seminario de Trata de Personas, organizado por Éxodo.

A pesar de ser una cifra alarmante, la cantidad de casos disminuyó con respecto al año 2019 cuando se documentaron 672 mujeres recuperadas.

Verónica Mesa, coordinadora de investigación de Mulier, señaló que, aunque la cifra se haya reducido, no implica que el delito se reduzca.

“La oficina del Delito de las Naciones Unidas dice que por cada víctima identificada, hay 20 víctimas más que no hemos podido identificar. Esta disminución también tiene que ver con la pandemia, porque los medios no tenían la misma posibilidad de trasladarse y nuestra investigación es a partir de la prensa”, explicó. 

Por otra parte, se supo que los casos de niñas y adolescentes venezolanas rescatadas sí aumentaron.

En el año 2020 hubo 124 en comparación con 2019, período en el que se registraron 90 rescates, lo que representa un incremento de 27,4%.

El Informe Global sobre la Trata de Personas, publicado en febrero de 2021, señaló que el número de niños y niñas entre las víctimas de trata se había triplicado en los últimos 15 años.

Por otra parte, se supo que la tendencia es que los países con más números de casos registrados estén en Latinoamérica y el Caribe. Entre estos, se encuentran: Colombia y Guyana con 60; Trinidad y Tobago con 52; República Dominicana con 32 y México con 26 casos.

La excepción es España, donde se registraron 39 casos, porque a pesar de la distancia, se comparten importantes nexos y porque suele ser un país de destino para los tratantes que captan a sus víctimas en naciones latinoamericanas, africanas o de Europa del Este.

El monitoreo “Libres y Seguras” concentró su seguimiento en las víctimas venezolanas de los casos aparecidos en medios de comunicación, debido al subregistro en el país.

La ausencia de cifras para la trata de personas es tan común que la Oficina Contra la Droga y el Delito de la Organización de las Naciones Unidas (Unodc) estima que, por cada víctima identificada de trata de personas, 20 permanecen ocultas.

De las 228 personas detenidas relacionadas con el delito de trata, 48,15% son de nacionalidad venezolana. 64 de ellos son hombres, 37 mujeres y al resto no se le pudo verificar el género.

En el seminario, Mesa indicó que el riesgo a ser víctima de redes de trata está en todos lados, incluso en personas de la misma nacionalidad o allegados, sin importar si son hombres o mujeres.

Advirtió que la estrategia más frecuente es la de personas conocidas, porque salen del barrio un tiempo, regresan con cosas lujosas que no tenían antes y estas personas se convierten en nexos porque usan como gancho esa experiencia de vida exitosa”.

Más vulnerabilidad por la COVID-19

Una de las situaciones que hizo que las niñas y adolescentes venezolanas, dentro y fuera del país, fueran más vulnerables a las redes de trata de personas fue la emergencia desatada por la llegada de la pandemia del coronavirus.

La deserción escolar fue uno de los factores. Se estima que el abandono de las escuelas superó 50%.

Y si antes de la pandemia se calculaba que 50% de la niñez venezolana que vive en Ecuador, Colombia y Perú no estaba matriculada, la “cifra solo puede empeorar a raíz del cierre de escuelas”.

Esto ha hecho que las niñas y adolescentes hayan tenido que ocuparse de mayores labores de cuidado y tareas del hogar.

“A su vez, la falta de escolaridad puede derivar en inseguridad económica y limitada autonomía, dos elementos que aumentan el riesgo de sufrir violencias basadas en género y de exposición a redes de trata”, reza el informe.

Otro factor es la separación familiar al momento de la migración, ya que uno de cada cuatro menores de edad de nacionalidad venezolana viajaba solos o separados de su familia.

“Además, la pérdida de ingresos por causa de la COVID-19 también puede llevar a las familias venezolanas a forzar a sus hijas a uniones tempranas o matrimonios infantiles”, alertan.

Un problema de género y de derechos humanos

La trata de personas en el mundo sigue afectando principalmente a mujeres y niñas con el 65 % de las víctimas identificadas, según la edición 2020 del Reporte Global sobre Trata de Persona de la oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito.

Aunque las redes de trata afectan a la población en general, la mayoría de las víctimas son mujeres, niñas y adolescentes, en las que hay impactos específicos porque están mucho más expuestas a las redes y luego a ser explotadas sexualmente.

Para la abogada Selene Soto de Womens Link, ninguna crisis es neutral al género. Y la de Venezuela tampoco es la excepción.

«La crisis humanitaria en Venezuela es un caldo de cultivo para las redes de trata y tráfico de personas. Y por supuesto la falta de respuesta institucional en casos de violencia contra las mujeres también abona a esa situación de vulnerabilidad”.

Soto explica que, al ser las mujeres y niñas el principal rostro de la trata como delito, pero sobre todo como una violación de derechos humanos, es muy importante que se tenga la mirada diferenciada del género para poder entender los impactos del fenómeno.

Por esa razón, la abogada señala que es importante que la problemática no solo se vea desde la perspectiva del delito, sino con una visión más integral de derechos humanos y también de migración.

“Hemos visto en Colombia como si bien en la Fiscalía o las autoridades anuncian el desmantelamiento de redes de trata en las que estaban principalmente siendo explotadas las mujeres venezolanas, pese a que supuestamente se desarticula o las rescatan de esta situación de explotación, la siguiente medida es regresarlas a Venezuela. Y es un problema, porque si consideramos que la trata es una forma de una violación de derechos humanos y una forma específica de violencia contra la mujer, debería ser suficiente para analizar la situación de riesgo, el acceso a mecanismos de protección internacional como el asilo y el refugio”, consideró.

Campaña contra la trata de personas

Durante este 30 de julio, y a propósito de la celebración del Día Mundial contra la trata de personas, la Organización de las Naciones Unidas mantuvo una campaña en redes sociales para concientizar sobre el tema. 

En varias publicaciones en la red social Twitter alertaron que debido a las restricciones de movilidad por la pandemia de COVID-19, mujeres y niñas están más desprotegidas contra la violencia de género y trata de personas. 

 

En otra publicación también alertaron que la trata de personas con fines de explotación laboral y sexual es una de las «violaciones más graves» de los derechos humanos.

 

El Organismo de las Naciones Unidas para la Migración (OIM) recalcó en sus publicaciones que 1 de cada 4 víctimas de trata de personas es menor.